El juego en México cuenta a día de hoy con mucha importancia en el territorio latinoamericano. Se puede decir que es una de las grandes potencias en este sentido que poco a poco va creciendo. El territorio nacional cuenta con casinos destacados, aunque son los casinos online los que están despertando mayor interés a estas alturas. Los jugadores que habitualmente frecuenten estas plataformas habrán observado que hay casinos internacionales que operan en muchos países y hay algunos que son exclusivos de la región de México. Estos últimos deben obtener una licencia para poder funcionar libremente y esa es la licencia SEGOB.
En el pie de la página de la web de muchos casinos encontraremos la marca SEGOB que hace indicar que ese casino cuenta con dicha licencia. Una licencia que lo que hace es otorgarle los permisos pertinentes para ser considerado un casino legal en el país mexicano. Sus siglas se corresponden con la Secretaría de Gobernación, que es la encargada de entregar estas denominaciones a través del órgano llamado Dirección General de Juegos y Sorteos. Los trámites para conseguirla no son sencillos, pero son necesarios para una libre competencia y para cumplir los reglamentos del Estado.
Los casinos no siempre necesitaron esta acreditación. En el siglo XX fue cuando aparecieron la mayoría de salones de juego y aprovecharon a Ley Seca de Estados Unidos que duró desde 1920 y 1933. Durante ese periodo no solo florecieron casinos, también casas de juegos e hipódromos. Algunos de estos últimos forman parte actualmente de los mejores casinos físicos que podemos encontrar en México. Tras un gran crecimiento en el sector, en 1947 apareció la primera ley relativa al juego, una ley ambigua y que propició el desarrollo descontrolado del sector.
Hasta los primeros años del nuevo siglo no se estableció un nuevo reglamento que diera respuesta a la demanda de los casinos y ahí es donde apareció La Dirección General de Juegos y Sorteos. Su misión es la de velar por una política de estado que regule de forma clara y concisa el juego y que también tenga en cuenta la responsabilidad social de los casinos y las casas de apuestas. Al mismo tiempo funciona como órgano de inspección, que controla que los usuarios a los que se adjudican las licencias cumplan con lo establecido en ellas.
Todo centro que se dedique al juego debe obtener los permisos de esta institución, desde salas de bingo a casinos físicos y online, pasando por peleas de gallos, carreras de caballos, ferias y sorteos de cualquier tipo. La Lotería Nacional es el único juego que no necesita de una licencia específica como tal. En cualquier caso, los usuarios deben ofrecer una amplia información al órgano rector para ser autorizados, siempre en beneficio de la transparencia.
Como tal, son pocos los casinos online que cuentan con la licencia SEGOB en México. Eso es porque todavía se está intentando regular la situación de forma definitiva en el país y contar con una ley de casinos. El reglamento de 2004 no era conciso en torno a estas salas que apenas empezaban a florecer y tomar relevancia, y hasta 2014 no se aprobó una nueva ley de juego en la que ya sí se regulaba el juego online.
Por esta razón los casinos online internacionales que permiten jugar a jugadores mexicanos son una gran alternativa. En cualquier caso, el Ejecutivo Federal está trabajando para que la nueva normativa se ponga en funcionamiento lo antes posible y que el plazo de paralización restante sea corto. Mientras tanto, los casinos online con licencia SEGOB son los que están ofreciendo mayor seguridad a sus clientes y más cercanía con el jugador mexicano.